Automatización robótica de procesos

A través de la automatización, la RPA cambia la naturaleza de cómo se realiza el trabajo en una empresa y puede agilizar enormemente sus procesos. Piensa en todas las tareas repetitivas, manuales y sin valor añadido que los empleados realizan cada día. La RPA puede encargarse de estas actividades a un coste menor y con mayor precisión y eficiencia.

Gracias a los modelos de aprendizaje automático, los robots informáticos avanzados son capaces de interpretar textos complicados, conversar e incluso tomar decisiones más complejas. Esto libera a los empleados de la carga de tener que realizar tareas repetitivas y de poco valor, para que puedan centrarse en un trabajo más importante y agradable, y que genere más valor.

Según Gartner, las principales capacidades de la RPA son el desarrollo de la automatización, las funciones de integración, los cuadros de mando de control, la identificación de las repercusiones de los cambios, la recuperación de errores y la seguridad, y la integración con las reglas empresariales/automatización de procesos. Para obtener el máximo valor de la implementación de la RPA, la tecnología debe implementarse con un enfoque que tenga en cuenta los procesos holísticos e integrales que aportan valor a los clientes.

La combinación de la RPA con la tecnología de inteligencia de procesos ayuda a las empresas a implantar los robots estratégicamente allí donde pueden aportar más valor. La RPA puede gestionar miles de procesos empresariales simultáneos y variados. La minería de procesos, el análisis y la generación de informes refuerzan las mejores prácticas para garantizar la mejora continua de la RPA.

Sobre todo porque la RPA puede generar rápidamente un alto rendimiento de la inversión mediante la automatización de tareas manuales repetitivas con un coste de inversión inicial reducido. Y dado que analiza y trabaja con los sistemas existentes, no perturba la infraestructura de TI existente. Además, también resulta muy fácil de utilizar a través de entornos de bajo código y capacidades de escalabilidad en toda la empresa. La RPA puede proporcionar rápidamente rendimientos elevados a cambio de unos costes mínimos y una implantación más sencilla en comparación con las tecnologías de la competencia. También puede utilizarse en multitud de procesos empresariales diferentes en una amplia gama de sectores.

Cuando mejoran los procesos de RPA, las empresas pueden aumentar rápidamente la capacidad de los procesos, acelerar los tiempos de producción y reducir en gran medida los errores y desviaciones de los procesos. La RPA funciona incluso con sistemas heredados y no perturba la infraestructura informática existente. Por último, permite a los empleados dedicar más tiempo a realizar un trabajo valioso e incluso crear sus propias automatizaciones.

La inteligencia artificial y la automatización de procesos robóticos no son lo mismo, aunque se complementan. La IA es la aplicación de máquinas que «aprenden» a «pensar» de forma independiente y a funcionar como los humanos. La RPA, por el contrario, es la emulación de acciones específicas: las pulsaciones de teclas en el teclado o un clic del ratón.

Sin la IA, la RPA no podría entender las razones por las que se realizan estas acciones. La combinación de IA y RPA crea una potente herramienta capaz de comprender las acciones en lugar de emularlas, lo que conduce a la automatización inteligente.